domingo, 12 de octubre de 2008

Poniendo un pie en Japón

Quince días han pasado desde la última entrada del blog. Diez desde que llegué a Japón y solamente uno desde que me pude sentar a hacer algo que no fuera correr de un lado para otro.

Desde que aterricé en Nagoya el día dos nada ha salido según el plan que traía yo en mente. la habitación que había alquilado en un apartamento al norte de Tokio resultó estar a menos de 10 metros de una autopista. Tras dos horas oyendo pasar camiones, decidí volver a la agencia y pedir un cambio de piso. Al día siguiente visité lo que es mi actual casa e hice la mudanza. Los 20 kilos de maleta entre el jet lag y la humedad agobiante que había en Tokio pesaban como 40.

Tras el ajetreo me presenté en la academia donde pasaré estos meses aprendiendo japonés. Me hicieron una prueba escrita. Y al decir escrita me refiero a las preguntas, porque las respuestas no fui capaz de contestar apenas ninguna. En la oral en cambio respondí a todo, pero si era a lo que me preguntaban o a otra cosa nunca lo sabré. Bueno, en realidad deduje que no había estado muy acertada en el momento que me dieron la hoja de ingreso con la clase que me habían asignado: la 1A. El parvulitos del japonés.

El resto de días los he dedicado a tareas bastante más productivas que interesantes: llenar la nevera, regular el sueño o proveerme de calcetines. Otras han sido tan poco productivas como interesantes: intentar comprar una bicicleta de segunda mano, decidir si hacerme con un móvil o no o buscar café descafeinado. Y también dedicarme a observar cómo el euro sigue cayendo, pasando de valer 160 yenes en agosto a 134 ayer.

Ahora, con la nevera llena, los pies calentitos y mis ocho horas de sueño, hasta he podido escribir un post.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

ánimo carol!! Que unas pocas dificultades no puedan contigo, además si los japoneses no saben japonés que le vamos a hacer :)

Carol dijo...

Es que esta gente...qué pocas ganas de integrarse :D

Gussitas dijo...

Así que pese al esfuerzo te han metido en parbulitos de japonés... ¿y que hacéis? ¿troquelais las letras esas raras con un punzón? Si te mandan colorearlas hazlo con cuidado y no te salgas mucho. ;)

Carol dijo...

Sí, jajaj. Mis deberes parecen sacados del Quién es quién, así que lo de los punzones no anda muy desencaminado.

Anónimo dijo...

Aprende todo lo que puedas que te estamos esperando para la cenita...¿ qué te parece que vaya reservando en un japonés...? :D

Anónimo dijo...

Pues me ha sorprendido y encantado el blog. Soy un gran aficionado al mundo japones, me encanta su comida, estudio desde hace 9 años el idioma (aunque en mi ciudad es dificil), adoro el cine japones (se nota por algunos comentarios en mi blog) y no te conocia. Gracias a 20 minutos llego y me quedo para aprender y compartir. Suerte en el concurso, yo tambien participo, y deseo poder seguir tus entradas de cerca.

Carol dijo...

Si hay cena, yo me apunto!

davicine, nueve años! jo, me debes llevar como 2.000 kanjis de ventaja. Yo de momento estoy en la fase de sumimasen y wakarimasen para todo.
Me voy a poner al día de cine japonés con tu blog porque entre las pelis y los doramas, no me entero de nada cuando comentan mis compañeras de clase.